Hablar del Papa está ya muy choteado, decir que su visita fue todo un circo es muy sabido, decir que Calderón lo hizo con fines políticos es evidente. Si se escuchó el discurso de bienvenida, decir que la religión es el opio de un país basta con ver los millones de creyentes que estaban esperando al representante de Dios en la tierra a pleno rayo del sol llorarando como si la madre de cada uno de ellos hubiera fallecido, es decir la faramalla que representó la visita Papal resultó ser lo que Calderón quería: engañar al pueblo con circo y teatro para favorecer a la Señora Josefina Vázquez Mota.
Lo que resulta simpático de la visita de Benedicto XVI es el papamóvil, este curioso carrito tiene su chiste, empezando por el precio ¿Qué les parece? El Mercedes ML 430 papamóvil tiene un valor estimado en torno a los 400.000€, unos cuantos euritos, casi nada; además, el cochecito puede ir a más de 160 kilómetros por hora, las llantas pueden seguir rodando aun ponchadas unos 112 Kilómetros, está de más decir que el blindaje es contra bombas, pesa más de cuatro mil kilogramos y dentro de ese precio no están incluidos los 25 hombres fornidos y guapos que corren como esclavos para custodiar al papamóvil y a su tripulantes. Es triste ver como 25 hombres van corriendo al lado de este vehículo en donde en su interior está el representante de Dios en la tierra que predica amor, igualdad y no a la esclavitud entonces ¿Por qué pone a correr a 25 cabrones durante todo su recorrido como si fueran perros tras un hueso?
También resultó simpático que hayan dicho que el vaticano no cuenta con avión privado es decir el Papá Benedicto XVI anda escaso en transportes aéreos y por eso vino en litalia seguro es para economizar "no tienen avión" como si no gastaran millones de dólares en otras tonterías como son cenas acompañadas de vinos cuyo precio no baja de los 5000 dólares por botella, los trajes papales hechos a la medida carísimos, los lujos que se dan en cada viaje, los anillos y joyería que trae en sus dedito y su cuellito, por favor, traer avión seria más humilde y al lado de sus gustitos no representa ni la milésima parte que la que sería el tener un avión.
Lo más chistoso es que dentro de ese cochecito viene uno de los hombres más poderosos del mundo que pretende traer esperanza a un pueblo que se encuentra en guerra, en miseria y en la peor de las decadencias. Con todo y lo jodidos que estamos nos hace gastar más de 75 millones de pesos. ¡Mejor hubiera dejado el papamóvil en el vaticano, él se hubiera quedado en su casa y nuestros 75 millones los hubiéramos puesto para construir hospitales y escuelas públicas!
Y RECUERDEN HAKUNA MATATA.
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